domingo, 7 de marzo de 2010

PESCANDO LENGUADOS : ¿CON BAJA O CON ALTA?

Foto de primer plano de lenguado. Mirados de cerca, sus inquietantes ojos parecen pedir una explicación....


Siempre ha sido una eterna discusión aquellas de si se debe pescar el lenguado con marea baja, o con con marea alta.

Con ese tema en la mente he enfrentado la pesca en cada una de mis salidas, siempre buscando la bajamar (o baja como le decimos por acá).

El Sábado 06 de Marzo la Tabla de Mareas indicaba que la baja sería como a las 10:20 horas, por lo que ya a las 8:00 horas estaba instalado en Caleta Pajonales.

Partí pescando con mosca en la playa, pero las inusualmente grandes olas me hicieron desplazar hasta las rocas del sector Sur, donde estuve mosqueando hasta cerca de las 10:00 horas. Posteriormente, cambié de técnica e intenté con pesca tradicional hasta cerca de las 13:00 horas. Y a pesar que exploré cada rincón de la playa, no pasó nada.

Igual quería explorar el sector Norte pero la llegada de una camioneta con surfistas...si, con surfistas, ......me devolvió a la realidad. El mar no estaba para la pesca. Al menos, no para la pesca de orilla.

Emprendí el regreso al sur con la idea de pasar por Baratillo, o por Agua de Luna, pero a pocos kilometros mi instinto me llevó a Caleta Totoral. Si bien el último tiempo el mar había estado muy movido por estos lados, al llegar a la orilla, el mar me pareció apropiado.

Lo malo, era la hora; las 13:30 horas marcaban con largueza el término del intervalo de buena pesca; dos horas antes y dos horas después de la marea baja.

El mar estaba inusualmente oscuro, de un color gris. Elegí mi caña mosquera con línea floating y leader sinking y por si acaso, como para practicar más que para pescar, también elegí una mosca nueva. Comencé a castear en el primer montón de piedras enfilando hacia el Norte. Seguí avanzando hacia el Norte y un poco más allá sentí una fuerte tomada, que me hizo reaccionar levantando la caña, pero no enganché nada, a pesar que la mosca elegida tenía doble anzuelo.

Mosca elegida para la ocasión, confeccionada con Marabou rojo en la cola, zonker blanco adelante y flashabou accent. El segundo anzuelo está oculto por el Marabou.

Insistí en el mismo lugar y al cabo de algunos minutos tuve una fuerte enganchada que me hizo pensar que era un lenguado grande. Al recogerlo, pude ver que solamente tenía 35 cm de largo. Lo devolví al agua sin daños. Eran ya las 14:00 horas.
Lenguado de 35 cm, bien alimentado y que dio buena pelea. Se aprecia un cuerpo en forma de rombo.


Volví a lanzar en el mismo sector y una fuerte tomada sacudió la línea. Creí que lo había enganchado bien porque sentí como luchaba. Mantuve tensa la línea, sentí las fuertes sacudidas, pero finalmente lo que haya estado al otro lado de la línea se soltó.

Retrocedí hacia el sur y lancé suavemente, esta vez no tan adentro sino al canalón que se forma por el reventón de la ola. Con sorpresa, unos minutos después enganché otro lenguado de 35 cm, que dio buena pelea y que también fue devuelto al agua.

Posteriormente la pesca se puso floja por lo que decidí cambiar a pesca tradicional, con caña de 2,70 metros, carrete rotativo Ambassadeur 6.500, e hilo trensado de 0,32 mm.

Con pejerreyes importados de la V Región, comencé en el mismo sector donde había dejado la pesca. Después de algunos lanzamientos sentí que algo se colgó de la armada por lo que comencé el habitual conteó y bajé la puntera de la caña. Tensé la línea y clavé. Al otro lado de la línea sentí claramente la lucha de un lenguado, que al traer a la orilla pude ver era de similar tamaño a los anteriores, y que también fue devuelto al mar.

Un cuarto lenguado en el mismo sector, sacado a las 16:30 horas, casi en la hora de la marea alta, me sirvió para marcar el término de la pesca, porque después, no pasó nada.


Lenguado de 35 cm sacado con pejerrey. Se aprecia un cuerpo más bien en forma de elipse.
Volvió a mi mente entonces la eterna discusión de si para la pesca del lenguado es mejor la baja que la alta. El resultado personal obtenido en esta salida demostraría que no es cierta aquella premisa que en la marea baja estará la mejor pesca. Pero habría que haber estado en esta misma playa para haber sabido que pasaba más temprano.

Para zanjar esta discusión, me parece que lo correcto es pensar como lenguado : un lenguado cuando llega a una playa no circula como lo hacen otros peces. Este busca el mejor lugar, que ojalá sea profundo, con el agua no muy clara y por el que circule su alimento preferido, los pejerreyes, o pequeños alevines de jurel, o sierra. Ahí se establecerá y permanecerá en la medida que se satisfagan sus expectativas, es decir, que esté protegido y que se alimente bien. Como en toda condición, deberá competir con otros de su especie por la mejor ubicación y ésta la ocuparán los ejemplares más grandes. Es por esto que los ejemplares menores son más voraces, porque están ubicados en los lugares menos protegidos y toman cuando pueden, todo lo que pueden.

Con la marea baja, los pozones más protegidos y profundos, siguen siendo apropiados y tal vez mejores para el lenguado, ya que presentarán menor cantidad de agua y una mejor visibilidad, pero igual obligarán al lenguado que se quede en éstos a no desplazarse. Por el contrario, los pozones más cerca de la orilla quedarán demasiado expuestos y no presentarán una buena alternativa, por lo que los lenguados en éstos deberán desplazarse hacia adentro.

Luego, a pesar de existir en marea baja menos lugares con lenguados, los que existan presentarán una buena oferta. Lenguados más grandes estacionados, con buena visión y con la tranquilidad de sentirse protegidos. Si alguien tiene la suerte de lanzar a estos pozones, la captura será muy buena.

Como conclusión personal entonces, en adelante no voy a dejar de buscar lenguados en baja, ni en alta, ni tampoco entre baja y alta.

¡Prácticamente, habrá que buscarlos en cualquier condición!....

Textos y fotografías
Jorge Thomas
Editor

1 comentario:

arqfusion dijo...

Hola Jorge
me parece muy interesante tu manera de comentar y explicar cada detalle de tu pesca, creo que mi conclusion seria la misma...los lenguados que he pescado no han tenido un patron nisiquiera relacionado con las mareas..eso si, hay lugares favorables....he tenido la suerte de encontrar uno de los grandes ( de 12 klgs ) en la tercera region en una playa plana con pozones bien marcados y buena corriente.
en cuanto al equipo que utilizas me llama la atencion ese tipo de carretes pero me frena su complejidad.
Me quedo con varias interrogantes como por ejemplo tu caña de casting como funciona, ya que ando buscando una y tambien tengo la berckley cherrywood en 2,7 y me gusta su desempeño creo que es muy versatil y se puede usar en condiciones bien variadas.
¿como seria la sensibilidad de una caña de casting? a mi me gusta una que va desde 3/4 oz a 4 oz en 2,7 o 3 mts
¿que carrete me recomendarias para comenzar con los horizontales?